domingo, 19 de junio de 2016

EL CAMINO QUE RECORREMOS


     El tunel es largo.   La luz se ve todavía a la distancia.  El camino es rocoso, tortuoso; difícil de maniobrar.   Pero ya comenzamos a caminar, y dar vuelta atras es más difícil todavía.  Significaría entrar otra vez a una cueva oscura y llena de peligros... mejor seguir adelante.  Eso es lo que sentimos los guatemaltecos el día de hoy!
     Entre cooperachas, cooptaciones, desfalcos, lineas y demás esquemas para engañar al pueblo, uno puede dudar de haber destapado la proverbia olla de frijoles.  Cada vez que comienza un juicio,  se convierte en el programa más  visto en la televisión.  Los abogados y sus defendidos hacen todo tipo de piruetas para detener el avance de la justicia: desde "mi defendido no ha desayunado" hasta "señor juez, necesito ir al hospital".  Todo eso provoca una gran desilución, por que la justicia se enlentece, y el proceso se vuelve absurdo y surrealista.  Y uno se pregunta:  Vale la pena?
     Pero que es peor, regresar en el tiempo cuándo los ladrones robaban sin medida; o luchar hacia adelante con la esperanza de que todo va a mejorar?  La luz en el tunel se ve pequeña, pero ahí esta.  Vale la pena caminar en la oscuridad.  La esperanza de que las cosas cambian, y que del otro lado hay un precioso jardín esperando es la motivación.  Y si no un jardín, por lo menos un lugar donde se pueda construir algo mejor!